Liturgia y santoral 5/7/13 MO: S. Miguel Santos
Memoria obligatoria: San Miguel de los Santos
– Gén 23, 1-4. 19; 24, 1-8. 62-67. Isaac, con el amor de Rebeca se consoló de la muerte de su madre.
– Sal 105. R. Dad gracias al Señor porque es bueno.
– Mt 9, 9-13. No tienen necesidad de médico los sanos: Misericordia quiero y no sacrificios.
En aquel tiempo, vio Jesús al pasar a un hombre llamado Mateo, sentado al mostrador de los impuestos, y le dijo: “Sígueme.” Él se levantó y lo siguió. Y, estando en la mesa en casa de Mateo, muchos publicanos y pecadores, que habían acudido, se sentaron con Jesús y sus discípulos. Los fariseos, al verlo, preguntaron a los discípulos: “¿Cómo es que vuestro maestro come con publicanos y pecadores?” Jesús lo oyó y dijo: “No tienen necesidad de médico los sanos, sino los enfermos. Andad, aprended lo que significa “misericordia quiero y no sacrificios”: que no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores.”
SANTORAL:
Santos: Antonio María Zacarías, presbítero; Atanasio, diácono y mártir; Agatón, Trifina, Basilio, Sédofa, Marino, Teodoto, mártires; Abel, Numeriano, arzobispos; Filomena, virgen y mártir; Cirila, Aroa, Lucía, Domicio, Doctrino, Juan, Simeón, mártires; Marta, Probo, Gracia, Esteban, Tomás, Trófima, Valeio, Zoe, mártires.
Miguel Argemir nació el día de San Miguel Arcángel en Vich, hijo de Enrique Argemir, consejero de la ciudad y de Montserrat Margarida, de profunda religiosidad. De pequeño, la tradición dice que a los seis años, hizo voto privado de castidad por amor a la Virgen de María, voto que renovó después. Huyó dos veces de la ciudad para retirarse a hacer vida heremítica, haciendo el camino del Montseny; en ambas ocasiones fue encontrado por su padre y devuelto a casa. Duerme, para hacer penitencia, con una piedra como cojín.[1] Intentó en 1603, ser aceptado en el convento franciscano de Vich, pero fue rechazado por su edad. Su padre lo quería enlazar con una chica, pero Miguel le convence y finalmente, obitene el permiso para empezar la vida religiosa; fue a Barcelona e ingresó en un convento del orden de los trinitarios, donde entra como novicio en 1604. Después de tres años de noviciado, tomó los votos en el monasterio de San Lamberto, en Zaragoza, el 5 de septiembre de 1607.
El encuentro con un trinitario descalzo le hizo la mayor austeridad de esta rama de la orden y, con el permiso de su superior, en 1608 entró en la congregación de los trinitarios descalzos de Oteiza (Navarra) y en Madrid como novicio. Tomó los votos en Alcalá de Henares. Estudió en Alcalá, Baeza (1611-1614, filosofía) y Salamanca (desde 1614, teología). En 1615 fue ordenado sacerdote en Faro (Portugal). En 1622, el superior de la orden le propuso como superior del convento de Valladolid, que gobernará con grandes aptitudes y respecto por la regla y los otrosfrailes. El exceso de modestia hacía que no quisera predicar, y solo lo hizo de manera habitual a partir de los treinta años, como Cristo. La frecuencia de sus episodios místicos incontrolables (éxtasis, raptos, etc.) hacía que no qusiera mostrarse mucho en público.
Durante su vida, Miguel de los Santos llevó una vida de oración y penitencia, provocando la admiracinó por su fervor. Devoto de la Eucaristía, se decía que experimentaba éxtasis durante la consagración eucarística, por la que fue nombrado el Extático.[2] Los primeros éxtasis se documentan cuando es, poco después de haber professado en la orden descalza, a los conventos de La Solana (Ciudad Real) y Sevilla. Destacó, además, como confesor, director y consejero espiritual.
A consecuencia de unas fiebras tifoidees, murió el convento trinitario de Valladolid el 10 de abril de 1625, a los 33 años, edad que él ya había predicho.